El templo parroquial del s. XIV está dedicado a S. Pedro. Tiene tres naves y cabecera con bóveda estrellada. Su ábside es rectangular con contrafuertes en las esquinas. La portada es renacentista con arco de medio punto con impostas, con imágenes y frontón clásico. Esta parroquia ha realizado inversiones muy elevadas en los últimos años en la recuperación de obras de arte. Destaca una imagen de S. Pedro y unos ornamentos litúrgicos, tal vez procedentes de S. Pedro de Arlanza.